Hace más de un año escribí unas líneas tratando de explicar los
inconvenientes del uso de dispositivos móviles en clase. En el fondo, mi intención no era otra que la de sentar las bases para el post que ahora lees. Considero adecuado tener presente los peligros del uso de una tecnología, mucho más en el ámbito educativo y trabajando con adolescentes menores de edad y muy vulnerables.
Y ya entonces, con los "smartphones" plenamente implantados en nuestras vidas como extensiones de nuestro cuerpo, hacía tiempo que las razones para su uso en el aula eran más que suficientes para modificar nuestra forma de trabajar.
La potencia de cualquier dispositivo móvil en manos de nuestros alumnos, de casi todos ellos, supera con creces la de todo el equipamiento informático de un instituto medio. Son, más alla de potentes ordenadores, auténticas navajas suizas multiusos. Es absurdo no aprovechar semejantes posibilidades por que lo diga un Regamento de Régimen Interno anticuado o escudándose en unos peligros que, eso si, habrá que controlar.
A estas alturas no voy a descubrir la pólvora. Muchos profesores permiten a sus alumnos que utilicen el móvil en clase, o usan sus propios móviles o tabletas para mil fines, desde buscar información (diccionarios, enciclopedias, archivos fotográficos, noticias, mapas...) hasta para pasar lista o comunicarse con las familias. Los centros de profesores organizan cursos para implementar su uso en las diferentes áreas y la oferta de recursos educativos no tiene fin.
No obstante, trataré de ofrecer mi visión particular y aportar lo que vaya aprendiendo y descubriendo en cuanto a recursos, técnicas y trucos para el uso de dispositivos móviles en el aula en el ámbito de las Ciencias Naturales. Comenazaré con unos ejemplos básicos para empezar.
Hay recursos de internet que representan, a mi modo de ver, potentísimas herramientas al servicio la expansión del conocimiento y su universalización y, aunque son anteriores a los teléfonos inteligentes, cobran mayor interés cuando cualquier alumno las tiene tan a mano, ya sea en clase o en su cuarto de estudio. Mencionaré las que más he utilizado en los últimos 5-10 años:
- Wikipedia, ejemplo de enciclopedia global, multilingüe, editable, en contínua evolución y cargada de recursos accesorios que la hacen trascender el viejo concepto (vídeos, audios, libros...)
- Wordreference, sólo un ejemplo de diccionario multilingüe, también con audio, y con páginas de debate para cada término.
- Google Earth. La madre de todos los mapas digitales. Para descargarte su contenido necesitarías 1 petabyte (1000 discos duros de 1 Terabyte)...Pero no es necesario, está en la nube. Sus posibilidades son infinitas en el campo de las ciencias o de la geografía, además de la economía, matemáticas...
- Google Sky. Si quieres aprender astronomía, imprescindible. Es como tener un potente telescopio en casa (...y ahora en tu bolsillo). Adiós a los antigüos planisferios.
- Youtube. Alguien se acuerda de cuando el profe llegaba con un carrito cargando el pack video + TV + unas cajas negras llamadas cintas VHS? La colección de pelis o docus de la que disponía el centro no solía sobrepasar la centena.
Por otro lado, en su papel de navaja suiza multiherramienta, los móviles pueden usarse de mil maneras, además de las consabidas calculadoras, relojes o cámaras de foto-vídeo. El límite lo pone nuestra imaginación. Hace unos días pude recurrir a la linterna de mi móvil, y del de algún alumno, para explicar el funcionamiento del iris del ojo humano; o para mostrar el rango de audición del oido (muy superior en el alumno que en el profe, por cierto). Hace unos años que un alumno me enseñó que con la cámara del móvil se podía "ver" la luz infrarroja de los mándos a disntancia, magia pura!!!.
Dejaremos para otra ocasión la multitud de aplicaciones (apps) diseñadas específicamente para las ciencias.